La expectación que causó la segunda corrida de la Feria de Huamantla que llevó a que se agotara el boletaje días antes de la fecha del festejo, correspondió con creces a la confianza de los aficionados. A la fecha tradicional de la Corrida de las Luces, se le sumó el atractivo de la vestimenta estilo goyesco, la celebración del centenario de la dehesa Rancho Seco y la entrega de los toreros, esencialmente de Arturo Macías que cortó dos orejas a un gran toro criado por don Sergio Hernández González, “El Zapata” se llevó un apéndice y “Calita” se fue a casa fue sin premio en la espuerta.
Arturo cuajó al quinto astado, bautizado como “Mueganito”, de buen juego por lo que recibió los honores del arrastre lento, al que remató de estocada trasera. Este hidrocálido se había repuesto de haber sido prendido en este toro y también en su segundo por lo que su paso por el coso La Taurina queda marcado por el entrega, la enjundia y el toreo completo. Al final de la corrida se le entregó el capote que estaba en liza.
Abrió plaza “El Zapata” que enfrentó toros enrazados y que le pidieron dar lo mejor de su tauromaquia, con la que lució con capote y banderillas. Al cuarto lo pinchó y en su búsqueda por obtener el triunfo regaló un toro, con el que aplicó la misma técnica, lo despachó al primer viaje y consiguió el ansiado trofeo.
Para Calita fue el lote con menores posibilidades ante el que estuvo esforzado, al tercero lo despachó de un espadazo tendido y al sexto, hasta el tercer viaje con el acero.
El resumen es: Lleno. Siete toros de Rancho Seco, el séptimo toro fue regalo, al quinto se le dio arrastre lento Uriel Moreno “El Zapata”: palmas en su lote y oreja en el de regalo; Arturo Macías: vuelta tras aviso y dos orejas; y, Ernesto Javier “Calita”: palmas y silencio.
PIE:
Se conjuntó la calidad del toro de Rancho Seco con buen el toreo de Arturo Macías . / FOTOS: CORTESÍA JUAN MANUEL CERVANTES
