El matador Emilio de Justo resultó volteado de fea manera al entrar a matar al primer toro de la tarde de su corrida en solitario en la plaza Las Ventas, en la capital española, de la cual resultó con lesión en el cuello que le impidió continuar la lidia y que fue catalogada por los médicos como muy grave.
El primer parte médico antes de salir de la plaza dió cuenta: «Traumatismo cervical fractura, se aplicó corticoide y analgésico a espera de estudio radiológico, presentando un cuadro de pronóstico grave».
Se trasladó a la clínica de La Fraternidad, donde se confirmó fractura de las vertebras C1 y C2, con fisura en la base del cráneo. Se le realizó resonancia magnética sin que se apreciara afectación medular pero si con lesión ligamentosa atlantodontoidea, de pronóstico muy grave. Esto de acuerdo a lo que confirmó el médico especialista Eduardo Hevia. Su recuperación podría llevar hasta tres meses por lo que perdería su confirmación en la Plaza México, prevista para el próximo de mayo, alternando con José Mauricio y Diego San Román, en la lidia de un encierro de Santa Fe del Campo.
La lamentable situación frustró su esperada comparecencia de lidiar seis toros en solitario en la plaza de Las Ventas, una tarde en la que el sobresaliente Álvaro de la Calle solventó la papeleta de lidiar los cinco restantes y apuntó una vuelta al ruedo; mientras que para De Justo se otorgó la oreja del mencionado primer astado.
El balance final es: Madrid, España.- Plaza de Las Ventas. Corrida de Domingo de Ramos. Lleno. Seis toros de distintas ganaderías: Pallarés, Domingo Hernández, Victorino Martín, Victoriano del Río, Palha y Parladé, entre los que destacó el cuarto por su clase, que fue premiada con vuelta al ruedo.
Emilio de Justo: Oreja del primero de la tarde, único que lidió; Álvaro de la Calle: Silencio tras dos avisos, ovación, vuelta, ovación y ovación.
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