El queretano Juan Pedro Llaguno se hizo presente en el máximo coso metropolitano: la Monumental Plaza Méico, para expresar su sentir de cara al doctorado que le dará el título de matador de toros este sábado 29 de enero, de manos de Antonio Ferrera, ante el testimonio de Juan Pablo Sánchez.
“Después de haber triunfado con fuerza en La Reapertura (cortó dos orejas), saldré a ganarme al público de nueva cuenta, pues es un cartelazo en el que recibiré mi doctorado, iré a lograr el triunfo, vendré a disputar el triunfo”. Llaguno Romero dijo que la víspera lidió tres vacas en la ganadería de Xajay y le restan tentaderos en Los Cués, Montecristo y Los Encinos.
Recordó con orgullo y alegría las faenas que el pasado 5 de diciembre lo llevaron a encumbrarse durante la novillada que lo colocó en el doctorado con el cual entrará al selecto grupo de toreros que han tenido el honor de recibir los trastos toricidas en el máximo ruedo nacional.
En especial se refirió a la salida en hombros de aquella tarde decembrina en la que su padre, el matador Juan Pablo Llaguno fue quien lo llevó en volandas: ”Me lo tenía prometido y lo cumplió”, dijo el hasta hoy novillero que, en sus raíces, fue formado taurinamente por él, antes de pasar a formar parte de escuelas taurinas en España. En la actualidad es apoderado por Tauro Espectáculos.
El reciente fin de semana, durante el festejo en León, Guanajuato, cortó una oreja a un toro de la ganadería San Martín, con lo cual puso fin a la etapa novilleril de su carrera. Se convertirá en matador de toros para seguir dando lustre al apellido Llaguno en el medio taurino, donde ésta estirpe que inició su bisabuelo don Antonio Llaguno González como ganadero de San Mateo (junto con su hermano Julián) en Zacatecas continua vigente, aunque en la vena de los toreros de pie.
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El menor de los Llaguno será matador de toros, este sábado. / FOTO: MARYSOL FRAGOSO
